Cuanto más crece un negocio, más grandes son sus obligaciones, decisiones, trabajos, facturación, etc. Llega un punto que se necesitan automatizar tareas para poder dedicarle tiempo a lo que realmente importan. Elegir un software industrial o un software a medida no es tarea sencilla, por lo tanto, es necesaria la ayuda de un consultor
La consultoría es un servicio de asesoramiento prestado por profesionales con conocimientos y experiencia en la materia o tema que la empresa necesite asesoría. Por lo tanto, el consultor es un profesional especializado.
Los consultores que brindan el servicio de consultoría pueden trabajar como independientes, asociados por proyecto o pertenecer a una organización.
Una consultoría tiene por finalidad ayudar a los clientes a alcanzar sus objetivos empresariales mediante el aporte de soluciones efectivas, basadas en una combinación de innovación y prácticas aceptadas por la industria. Es un servicio de valor agregado que, bien realizado, tiene un papel importante en el despliegue de una empresa.
El servicio de consultoría debe ser planeado. Esto significa que tiene un inicio, un desarrollo y un fin. Dicho de otra forma, debe ejecutarse mediante un plan y con uno o más entregables o resultados durante su ejecución.
El proceso para la contratación de una consultoría comienza con el primer relevamiento de la empresa – cliente. Esta tarea permite conocer lo mínimo que se necesita para realizar una propuesta de trabajo que incluya una primera valoración del proyecto.
Una buena propuesta de servicio de consultoría contiene, al menos, los siguientes elementos:
En muchos casos, como parte del contexto, se incluye un diagnóstico o situación actual. Si la propuesta es aprobada, comienza la consultoría.
Las empresas persiguen constantemente metas como mejorar su desempeño; aumentar la productividad; revisar la estrategia; optimizar las operaciones; innovar; agregar valor a su propuesta; mejorar la relación con los clientes; fidelizar al capital humano; y otras más.
El 80% de las empresas que se forman no llegan a cumplir los 5 años de vida. Si bien hay diversas razones para que ello suceda, algunas internas o controlables y otras externas o no controlables, la desaparición de una empresa se puede evitar acudiendo a profesionales que aporten sus conocimientos y experiencia mediante sus servicios de consultoría.
A medida que una empresa se expande, su complejidad aumenta y se hace necesario el apoyo de profesionales externos que ayuden a dar solución a los problemas que surgen.
El servicio de consultoría externo lo realizan personas que están fuera de la organización y por lo tanto no están “contaminados” con la operación diaria o con los vicios de la compañía. El consultor, con su aporte desafiante, fresco e innovador, puede encontrar espacios u oportunidades de mejora que no alcanzan a ver quiénes están adentro.
Es desafiante porque sus intervenciones generan debates que son motivantes y sirven como estímulo para reflexionar y volver a pensar la forma de hacer las cosas.
El consultor, en tanto imparcial y neutro, ayuda a encontrar soluciones e impulsa la implementación de los cambios que pueden llevar de la situación actual a la deseada. Su trabajo tiene ventajas y beneficios para la empresa cliente.
Veamos qué otros temas son necesarios a saber acerca de los servicios de consultoría…
Un consultor es un profesional que brinda servicios a organizaciones con el objetivo de identificar sus áreas de oportunidad y, a partir de ellas, elaborar propuestas de mejora y acompañarlos en su proceso de implementación de forma tal que se llegue a los resultados planeados.
Las características de los consultores deben corresponder a la naturaleza del problema planteado y a las necesidades específicas del cliente.
Los consultores interactúan con una amplia variedad de empresas, de diferentes rubros y tamaños. Su trabajo apoya personas de diversos niveles, con distintos conocimientos y formación profesional. El servicio de consultoría a veces se brinda de manera individual y otras integrados a equipos de trabajo.
Por ello, el consultor debe poseer habilidades blandas (Soft Skills) y especialidad técnica. Un consultor debe ser:
Debe estar abierto al aprendizaje permanente, tanto en la experiencia diaria como en los temas académicos, y debe ser capaz de trabajar bajo presión.